“Los avances tecnológicos, que han representado importantes ventajas para las empresas en cuanto a ahorro de costes, agilidad, ampliación de mercados y expansión, han traído como contrapartida nuevos riesgos que, si no se analizan, valoran y gestionan de forma adecuada, pueden poner en riesgo la reputación, resultados y hasta la continuidad en el mercado”, señala María Martín Martínez de Lecea, directora regional Centro de Aon, que destaca el cibercrimen, el hacktivismo, el espionaje industrial, los fallos en los sistemas y en la seguridad y la actuación de los propios empleados, ya sea intencionada o accidental, como algunas de las nuevas amenazas a las que se enfrentas las compañías.
Servicio global
“En Aon hemos desarrollado un servicio global para ayudar a nuestros clientes en la identificación, análisis y valoración de los ciberriesgos y hemos diseñado las pólizas de seguro específicas más amplias del sector para la transferencia al mercado asegurador de estos nuevos e inciertos riesgos a los que se enfrentan las empresas”, puntualiza Martín Martínez de Lecea, quien subraya también la necesidad de tener en cuenta que el carácter global de las compañías y la procedencia geográfica de las amenazas afecta a distintas legislaciones.
Asimismo, apunta que aunque los ciberriesgos se han convertido en una creciente preocupación entre los consejeros y directivos de las empresas, todavía se percibe como un asunto muy encuadrado en el Departamento de Sistemas, “cuando en realidad afecta a casi toda la organización”.
Más información en el número de septiembre de la revista Castilla y León Económica.
