Los profesionales españoles destacan la flexibilidad (35,9%) que aportan los espacios de coworking y el entorno creativo (24,8%) como las principales ventajas de estas zonas de trabajo, según se desprende de un estudio realizado por Randstad. No obstante, también valoran el dinamismo (20,9%) que ofrecen y el ahorro de costes (18,5%) que supone esta nueva forma de trabajar que permite a las empresas compartir infraestructuras.
Asimismo, ven relevante también el hecho de carecer de instalaciones y de puestos de trabajo designados y propios. Sin embargo, los entrevistados consideran que en estos espacios de trabajo no hay tanta privacidad como en los tradicionales.
Sin identidad corporativa propia
Otras diferencias relevantes para los encuestados son que no haya una identidad corporativa propia y definida y que no haya una jerarquía visible y patente en el entorno de trabajo. Randstad ha puesto de relieve que el coworking no ha dejado de crecer en los últimos años hasta convertirse en una tendencia en el mundo del empleo.
Según el informe de la empresa de soluciones de recursos humanos, aunque es un estudio con gran recorrido, sólo el 12% de los cuestionados ha tenido ocasión de trabajar en uno de estos espacios de trabajo.
Castilla y León Económica / Europa Press
