Los grandes bancos españoles necesitan 26.161 millones de fondos adicionales para alcanzar el ratio de capital de calidad del 9% acordado por los jefes de Estado y de Gobierno de la UE, según informa la Autoridad Bancaria Europea (EBA, por sus siglas en inglés). El 84,3% del importe global lo concentran Banco Santander y BBVA, con 22.057 millones, distribuidos entre los 14.970 millones de la entidad cántabra (57,2% del total) y los 7.087 de la presidida por Francisco González (27%). Por detrás se sitúan Banco Popular, con 2.362 millones (9,02%); Bankia, con un déficit de 1.140 millones (4,3%); y La Caixa, con 602 millones (2,3%).
La banca española concentra cerca de la cuarta parte del total de 106.400 millones que costará la recapitalización de las entidades europeas. España es el segundo país con mayores necesidades de recapitalización, sólo por detrás de Grecia (30.000 millones).
Esta factura incluye 6.200 millones de euros por la depreciación de la cartera de deuda soberana de la banca (menos de un 3% en el caso de los bonos españoles, según Moncloa) valorada a precios de mercado a fecha del 30 de septiembre de 2011.
Contención hasta junio de 2012
Los líderes europeos pidieron a las entidades que lleven a cabo el proceso de recapitalización antes del 30 de junio de 2012. En primer lugar, deberán recurrir al mercado privado. Si no logran los fondos necesarios, tendrán que pedir ayudas nacionales. En caso de que el Estado miembro no pueda prestarlas, podrán recurrir al fondo de rescate de la UE.
Durante el período en que no cumplan los requisitos de capital, los bancos tendrán que restringir el pago de dividendos y bonos. Las entidades tendrán que presentar al Banco de España un plan de recapitalización a finales de 2011.
Deuda griega y refuerzo del fondo de rescate
En paralelo, los líderes de la eurozona alcanzaron este jueves, tras 10 horas de negociaciones, un acuerdo con la banca para que asuma pérdidas del 50%, cifra que equivale a 100.000 millones de euros, sobre los bonos griegos que tienen en su balance. El objetivo de esta quita es reducir el nivel de deuda de Grecia al 120% del PIB de aquí a 2020, según explicó Angela Merkel, canciller alemana, frente al 180% al que estaba previsto que llegara en 2012.
El impago parcial de la deuda griega es uno de los 3 pilares del plan aprobado por la cumbre del Eurogrupo para combatir la crisis de deuda. Los jefes de Estado acordaron además reforzar el fondo de rescate hasta 1 billón de euros y la ya mencionada recapitalización de la banca con 106.000 millones.
A cambio de esta reducción del nivel de deuda de Grecia, Merkel reclamó que la UE establezca una supervisión permanente sobre el país para garantizar que lleva a cabo las reformas comprometidas para recortar su déficit y mejorar su competitividad. Para evitar que la quita de Grecia empeore el contagio a la crisis de deuda de España e Italia, los líderes europeos aprobaron también apalancar el fondo de rescate de 440.000 millones de euros para que alcance una potencia de 1 billón de euros.
Esta cantidad se logrará sin aumentar las garantías que aportan los Estados miembros y sin recurrir al Banco Central Europeo (BCE), como exigía Alemania. El fondo se utilizará para avalar parte (entre el 20% y el 25%) de las nuevas emisiones de deuda de Italia y España en lugar de comprar directamente los bonos. De este modo se multiplicaría por 4 la potencia de fondo, teniendo en cuenta que en realidad sólo quedan alrededor de 250.000 millones tras los compromisos asumidos con Grecia, Portugal e Irlanda.
Más reformas contra el paro en España
En este mismo encuentro, los líderes europeos elogiaron las medidas adoptadas por España para combatir la crisis de deuda, pero reclamaron que prosiga el ajuste fiscal, especialmente en las comunidades autónomas, y que se realicen más reformas laborales para reducir el nivel de paro y se profundice la liberalización del sector servicios.
“Aplicar estrictamente el ajuste presupuestario como está previsto es clave, también a nivel regional, para cumplir los compromisos del Pacto de Estabilidad y Crecimiento”, insiste la declaración aprobada por los jefes de Estado y de Gobierno de la eurozona. En este sentido, solicita que se desarrolle cuanto antes la legislación necesaria para hacer “plenamente operativa” la inclusión del principio de estabilidad presupuestaria en la Constitución.
Europa Press / Castilla y León Económica
