Con una plantilla de 15 trabajadores y 150 socios, la cooperativa Reina Kilama, ubicada en San Miguel del Valero (Salamanca), alcanzó en 2015 una facturación de 6,31 millones de euros, un 5% más que el año anterior. Su actividad se centra en la comercialización de miel, polen, láminas de cera y cosméticos.
“Además, suministramos a los socios todo lo que necesitan para sus colmenas”, detalla Santiago Canete del Río, que recuerda que la creación de esta sociedad en 1997 se debió a la necesidad de constituir “una estructura apícola fuerte en Castilla y León, que es la tercera comunidad autónoma productora de miel a nivel nacional, tras Andalucía y Extremadura, para evitar el estrangulamiento que sufría el sector en manos de intermediarios”.
Caída de precios
“Desde 2015 se está registrando una continua caída de los precios del sector apícola en España, que se mantiene a pesar de que la campaña de 2016 va a ser cerca de un 40% menor que la anterior. Esto se debe a la importación de países como China, Argentina y Ucrania a unos precios más baratos y, en algunos casos, de dudosa calidad”, comenta el presidente de la cooperativa salmantina, que reclama un etiquetado que permita al consumidor conocer el origen del producto que compra. Esta situación provoca que Reina Kilama exporte el 90% de su producción. “También mantenemos abiertos otros mercados como algunos países árabes y Rusia”, añade.
Crecimiento
Las instalaciones de la cooperativa salmantina incluyen laboratorio, plantas de envasado de miel, de limpieza y selección de polen y de procesado de cera, sala de conferencias, naves de almacenamiento y oficinas, todas ellas ubicadas en 9.000 metros cuadrados de terreno propio y 3.000 metros cuadrados construidos. “Desde la fundación de la sociedad, no hemos parado de crecer”.
Así, en 2015 se finalizó la construcción de una nave de 1.000 metros cuadrados “y la adaptación de los terrenos para muelle de carga y descarga, cámara de calor y procesado de homogeneización de la miel”, apunta el presidente de Reina Kilama, que avanza que la cooperativa trabaja en la actualidad en la modernización de la sección de cera con la adquisición de una moderna maquinaria que se emplea en España por primera vez para lavar y fundir los panales de cera.
Asimismo, comenta que entre sus proyectos a corto plazo se encuentra modificar las máquinas de laminado de cera para que los apicultores puedan realizar ellos mismos esta operación. “También pensamos reformar y ampliar la línea de envasado”, apunta Canete del Río. Al ser apicultores trashumantes, los socios de Reina Kilama producen mieles de diferentes tipos y floraciones, como la de encina, de la que son uno de los principales productores a nivel mundial, de tomillo y la de brezo o miel de flores; así como polen, un sector que lideran en Europa.
Más información en el número de enero de la revista Castilla y León Económica
