Smurfit Kappa ha desarrollado recientemente para uno de sus clientes un punnet para uvas resistente, respetuoso con el medio ambiente y de fácil montaje. Una solución que ha cumplido con el desafío de llevar al punto de venta y a casa del consumidor final, cada vez más preocupado por la sostenibilidad, un embalaje reciclable y biodegradable, pero que a su vez fuera resistente a la cadena de suministro, fácil de montar, atractivo y mejorara la imagen de marca del cliente en el lineal.
Hasta ahora, este cliente había presentado su producto en el punto de venta en embalajes no biodegradables que dejaban ver el contenido, pero que no mostraban su imagen de marca y dañaban el medio ambiente. Consciente del problema que suponen este tipo de embalajes para los océanos y el planeta en general, acudió a Smurfit Kappa, que tras analizar sus requerimientos presentó una solución fabricada en cartón ondulado que cumplía con todos sus requisitos de sostenibilidad, resistencia e innovación.
Raul Andre, General Manager de Smurfit Kappa Celpack, ha asegurado que tras escuchar la problemática y los principales requisitos del cliente “en términos de sostenibilidad e imagen, diseñamos una solución con un aspecto simple y agradable y fabricada en cartón ondulado blanco para poder plasmar en ella su imagen de marca en impresión flexográfica de color. Su grado de satisfacción es muy alto, lo que nos ha llevado a producir una gran cantidad de estos punnets para uvas”.
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