Con vistas a uno de los numerosos y coquetos canales de Amsterdam, también conocida como la Venecia del Norte, el Restaurante Samhoudplaces se ubica en un atractivo local de 2 plantas con sendos conceptos de cocina diferentes. En la planta baja se sitúa un gastrobar llamado Street food, que ofrece una limitada carta de platitos eclécticos y con cierta influencia asiática, además de ostras. Una opción asequible y divertida.
En la segunda planta con un gran montaje de cocina vista a través de enorme cristalera y una amplia barra que permite comer observando el trajín de los chefs, se sitúa Samhoudplaces. Con techos altos, pocas y separadas mesas, todas ellas con vistas al canal, el chef Moshik Roth plantea varios menús como el Vegetariano o el Inspiración, que pueden además degustarse en versión corta o larga, o incluso añadir extras.
Entrantes
El menú vegetariano comienza con pequeños entrantes como la Pizza con boletus o la Cuchara de remolacha con huevas de salmón y yogur, un contraste sápido acertado. Atrae por su minima presentación y sorprende por sus ingredientes el Tartar de remolacha y huevo de codorniz, mientras el toque picante acentúa el frescor del morado tubérculo. Se acompaña además con un gazpacho elaborado a base de remolacha y rábano picante muy especiado.
El Ravioli con setas y crema de coliflor es correcto, pero no emociona. El juego de contrastes presentado en un plato que mezcla gastronomía nipona con italiana al presentar una serie de nigiris fallidos junto con un logrado risotto con quesos del Piamonte, trompeta de los muertos y angula de monte, decepciona por la brutal descompensación a favor de la cocina italiana.
Reconocida la dificultad que entraña elaborar un menú sólo a base de productos vegetales, hay que reseñar que se echa en falta la variedad de la despensa verde tan atractiva y desaprovechada quizá por falta de imaginación, innovación y riesgo, ingredientes a los que sí estamos acostumbrados en los restaurantes españoles con 2 estrellas Michelin.