El real decreto que incentiva la quema de carbón nacional en centrales térmicas tendrá un coste total de 592 millones de euros hasta el cierre de 2011, a razón de 89 millones en 2010 y 503 millones en 2011, y no provocará un desplazamiento significativo de los ciclos combinados de gas, pero sí de las centrales de carbón de importación. Estas consideraciones aparecen recogidas en el informe de la Comisión Nacional de la Energía (CNE) aprobado por el consejo de administración del organismo y en el que se analizan los desarrollos normativos ideados por el Ministerio de Industria para permitir la puesta en marcha del nuevo decreto.
Los cálculos de la CNE parten de la hipotética entrada en funcionamiento del decreto el próximo 1 de noviembre y de que, como establece Industria, cada año se programará una producción de 23 teravatios hora (TWh) de electricidad en las centrales de carbón nacional, lo que permitirá dar salida a 10,1 millones de toneladas de carbón autóctono. Esta producción equivaldría en 2011 a un 9% de la demanda eléctrica estimada peninsular, de 263,6 TWh, y a un 6% si sólo se toma en cuenta el carbón nacional dentro de la mezcla de distintos combustibles utilizada por las plantas. Estos porcentajes no alcanzarán en ningún caso el límite del 15% hasta el que la Comisión Europea permite primar el combustible nacional para reducir la dependencia energética de los Estados miembros.
Por otro lado, dados los compromisos de compra de carbón nacional por parte de las centrales, la CNE calcula que el stock de Hunosa, de unos 10 millones de toneladas, se reducirá a un ritmo de un millón de toneladas al año.
Ciclos combinados
En cuanto a los ciclos combinados, el organismo presidido por María Teresa Costa asegura que “no se verían en principio desplazados por la puesta en marcha del mecanismo de restricciones por garantía de suministro”.
Las compañías eléctricas han recurrido el decreto del carbón ante el Tribunal Supremo y el Tribunal de Luxemburgo por el daño que genera a las centrales que, como los ciclos combinados de gas, resultarán desplazadas.
Europa Press