Cajamar Caja Rural celebró este jueves la Asamblea General Ordinaria de Delegados. En su discurso inaugural, Eduardo Baamonde, su presidente, trasladó a los socios asistentes que “tras finalizar una etapa de consolidación hemos iniciado una nueva etapa de crecimiento”. Asimismo, resaltó que la actividad desarrollada en 2024 por la entidad “nos ha permitido no sólo cerrar el ejercicio con un resultado récord -272 millones de euros de Cajamar individual y 326 millones de euros por parte de Grupo Cooperativo Cajamar-, sino también mejorar todos nuestros indicadores, lo que nos ha hecho merecedores de elevar también nuestra calificación en las principales agencias de rating y alcanzar el grado de inversión en las tres más importantes, S&P, Fitch Ratings y DBR Morningstar”.
Gracias a la buena evolución del negocio bancario, la entidad ha mejorado la cuota de mercado nacional, tanto en depósitos como en inversión crediticia, “resultado de una visión compartida, de una vocación de servicio y de un compromiso con la sociedad, con nuestros clientes y, por supuesto, con nuestros socios, desde la convicción de todos y cada uno de nosotros de que tenemos que seguir mejorando cada día”. Y puso en valor la confianza de los socios, ya que en 2024 la entidad superó por primera vez los 1,6 millones de socios y contó con 3,5 millones de clientes en toda España.
El presidente de Cajamar anunció que este año la entidad completará su presencia nacional en todas las provincias españolas, con la apertura este mes de mayo de una oficina en San Sebastián, siendo la única caja rural presente en todo el territorio nacional. Y apuntó el esfuerzo realizado por la cooperativa de crédito por seguir presente en el medio rural en aquellas localidades de baja densidad de población para evitar la exclusión financiera de muchos de sus habitantes. En este sentido, explicó: “que tenemos más de un tercio de nuestra red de sucursales en poblaciones con menos de 5.000 habitantes y seguimos ampliando nuestras unidades móviles para dar servicio a las poblaciones que ya no tienen sucursales bancarias. En la actualidad, 12 oficinas itinerantes prestan sus servicios en 78 poblaciones de la España rural de Alicante, Almería, Castellón, Cuenca y Valencia”.
Asimismo, señaló que la entidad tiene en marcha “un ambicioso plan de transformación tecnológica para actualizar permanentemente nuestros servicios y estar a la altura de las entidades más punteras, sin renunciar a la proximidad física y emocional con nuestros clientes. Todo lo contrario, ya que liberará de tareas burocráticas y concentrará la atención de nuestro personal en las labores que aportan más valor: la atención a nuestros clientes”.
Sector agroalimentario
Baamonde recordó que en Cajamar “seguimos siendo fieles a nuestra misión: contribuir al desarrollo económico y social en las zonas en las que estamos implantados” y subrayó su papel en la generación y transferencia del conocimiento en el sector agroalimentario, “buscando soluciones a las necesidades y oportunidades del sector, con el sector y para el sector”. Así, puso en valor los medios dedicados, a través del Fondo de Educación y Promoción de la caja rural, a fomentar la innovación y la sostenibilidad de la cadena agroalimentaria a través de “nuestra contribución a la difusión de nuevas tecnologías y prácticas agronómicas, a la realización de estudios y publicaciones, la organización de jornadas y eventos divulgativos, creando lo que yo denomino un ecosistema del conocimiento que nos permite ser una entidad diferente y referente para el sector no sólo en España, sino también a nivel internacional”.
Castilla y León Económica