Rocío Lucas, consejera de Educación, presidió este viernes en la Facultad de Educación y Turismo del campus de Ávila, de la Universidad de Salamanca, la entrega de premios de los 2 certámenes integrados en el Plan TCUE: Iniciativa Campus Emprendedor y Desafío Universidad-Empresa, correspondientes a la edición de 2024.
Durante el acto, recordó que la Junta lleva más de 15 años apostando por el Plan de Transferencia de Conocimiento Universidad – Empresa (Plan TCUE): “detrás de todos los proyectos generados durante estos años, se esconden historias reales de jóvenes inquietos, de docentes comprometidos y de investigadores solventes, que han apostado por transformar ideas en soluciones, y conocimientos en avances”.
Finalmente felicitó a todos los promotores, “hoy hemos conocido proyectos orientados a la sostenibilidad, al aprovechamiento de recursos autóctonos, a la inteligencia artificial y a la innovación social. Todo ello con una clara vocación transformadora y de compromiso con los retos actuales”.
XVI Iniciativa Campus Emprendedor
En la modalidad de Proyecto Empresarial, el jurado seleccionó los 3 trabajos que han accedido a la fase final de exposición pública. Con una dotación en premios superior a los 33.000 euros, su objetivo es fomentar la aparición de nuevas empresas en la región. Finalmente, se alzó con el primer puesto el proyecto BiLern, presentado por 3 alumnos de la Universidad de Valladolid, Pablo Miñambres, Marcos Martínez y Miguel González, ganadores en la edición anterior de este mismo concurso en la modalidad de Idea innovadora de negocio. Plantea la puesta en marcha de una plataforma informática de aprendizaje automático para facilitar el proceso de memorización.
En segundo lugar, la iniciativa Astraspec-sensores de gases para aplicaciones terrestres y espaciales, presentada por Marco Veneranda, Guillermo López y Sofía Julve, investigadores de la Universidad de Valladolid, que trabajan en la detección de gases en tiempo real, de forma simultánea y precisa. El sistema añade eficiencia a determinados procesos industriales y ayuda a mejorar la prevención de accidentes.
Por último, el tercer puesto fue para Sembrando Salud, presentado por Sergio Álvarez, investigador de la Universidad Internacional Isabel I de Castilla, que es una apuesta por una plataforma de servicios integrales y personalizados para mejorar la salud y el bienestar de sus diferentes tipos de usuarios.
Adicionalmente, el jurado otorgó una mención especial al proyecto Caronte, enfocado a la reconstrucción virtual del patrimonio y presentado por Samuel Arias y Mario Alaguero, investigadores ambos de la Universidad de Burgos.
Por otro lado, en la modalidad Idea Innovadora de Negocio, el primer premio correspondió al trabajo Máscara Electrónica DISEJUF de Atención Respiratoria Domiciliaria Digitalizada, presentado por Diego Fernández, investigador de la Universidad de Valladolid, en su campus de Soria, y otros 2 investigadores de la Universidad de León, Jesús Seco y Juan Felipe García. Los 3 proponen un tele dispositivo médico de precisión para controlar el flujo de aire y contribuir al fortalecimiento de la musculatura respiratoria y la capacidad pulmonar.
El segundo fue para una propuesta presentada por 5 miembros de la Universidad de Salamanca: Andrés Sanz, Ana Mª Martín, Jorge Herrera, Armando González y Fátima Pérez. Su trabajo, denominado Dispositivo de tratamiento del Control de Tronco en Sedestación, que plantea el desarrollo de un innovador sistema para ayudar a personas con daños neuromusculares que incorpora realidad aumentada.
El tercero le fue otorgado a la idea Producción de dimetil éter a partir de biomasa para el diseño y fabricación de un motor cohete, presentada por David Alegre y Darío Álvarez, alumno y egresado respectivamente de la Universidad de León, con una propuesta para obtener energía a partir de residuos de madera con aplicabilidad en el sector aeroespacial.
XII Desafío Universidad-Empresa
En este certamen, con una dotación en premios de 46.000 euros, el primer premio recayó en el proyecto Piedras naturales tratadas con materiales de cambio de fase para la mejora del aislamiento térmico en fachadas. La propuesta, que responde a un desafío planteado por la empresa burgalesa Areniscas de Vilviestre, pretende diseñar una unidad constructiva incorporando un novedoso sistema de almacenamiento térmico. Fue presentada por el investigador José Manuel González, de la Universidad de Burgos.
La iniciativa Utilización de herramientas de inteligencia artificial en los procesos de compostaje para minimizar las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) y mejorar su capacidad biofertilizante, que responde a una demanda de la empresa salmantina CONALDI agropecuaria, logró el segundo premio. Su objetivo es poder llegar a producir un fertilizante orgánico de alta calidad, con un mínimo impacto ambiental, según la propuesta del investigador Carlos Cambra de la Universidad de Burgos.
Por último, alcanzó el tercer premio el proyecto Plataforma de guiado para personas invidentes, que proponen los investigadores David Cruz y Gabriel Villarrubia de la Universidad de Salamanca como respuesta a un reto planteado por la empresa salmantina CARTTECLAB. El desafío en este caso pasa por el empleo de gafas con cámara y sensores para captar información del entorno y transmitirla en tiempo real a usuarios invidentes.
En esta ocasión, el Premio Especial Nuevos Emprendedores ha sido para el proyecto Digitalización de un Domo geodésico autosuficiente con telemetría remota, con el que se pretenden desarrollar estructuras arquitectónicas ecológicas, activas y eficientes. La propuesta responde a un reto planteado por la empresa zamorana de reciente creación Sol Arte Creaciones. El equipo investigador está integrado por Sara Rodríguez y Albano Carrera, ambos de la Universidad de Salamanca.
Finalmente, el jurado ha otorgado un accésit por su uso de la Inteligencia Artificial con fines medioambientales a la propuesta Transferencia de Tecnología Espacial Basada en Inteligencia Artificial para la Automatización de Sensores de Monitorización Ambiental presentada por el investigador José Antonio Manrique de la Universidad de Valladolid.
Castilla y León Económica