Si hay una característica que puede definir la trayectoria de Soluciones de Ingeniería Industrial (SII) es la prudencia, lo que ha permitido a esta empresa familiar vallisoletana celebrar en 2025 su 20 aniversario tras haber superado importantes escollos, que dejaron fuera del camino a otras compañías del sector de la energía solar en Castilla y León. “Siempre hemos sido muy conscientes del momento que vivíamos y no nos han sorprendido los cambios”, apunta Gerardo Conrado Choya, director comercial de la compañía, mientras que su hermano David, responsable de la Dirección Técnica, añade: “no hemos crecido de manera desproporcionada en estructura en las épocas de vacas gordas, lo que nos ha permitido gestionar mejor las situaciones de crisis que hemos atravesado”.
Otro factor destacado en la evolución de esta compañía es su carácter familiar y la cercanía a los clientes, que se refleja en un trato personal y la implicación directa de los máximos responsables en cada uno de los proyectos que desarrollan, desde la contratación hasta su puesta en marcha.
Inicios
Estos 2 hermanos pusieron en marcha SII al tiempo que presentaban el Proyecto Fin del Carrera de Ingeniería y animados por su padre, Gerardo Conrado Marcos, se decantaron por un todavía incipiente sector de las energías renovables. Sus primeros proyectos tuvieron lugar en Murcia, para aprovechar la importante irradiación solar de esta zona, y progresivamente su actividad fue creciendo hasta alcanzar cifras de negocio por encima de los 20 millones de euros.
En 2008 se produjo una tormenta perfecta al coincidir el cambio regulatorio del sector, que eliminó las ayudas a las plantas solares, con la crisis económica, lo que provocó que las ventas de esta compañía apenas se mantuvieran para cubrir las necesidades de la empresa en esos momentos. “Fueron unos años de frenada brusca en el sector que solventamos con la puesta en marcha de Mantenimientos Eléctricos y Solares (Mesol), especializada en el mantenimiento de los parques que habíamos desarrollado con anterioridad y que nos permitió mantener cierta actividad”, detalla Gerardo, mientras que David señala que en esos años “desapareció todo el tejido empresarial español del sector y se inició la importación de componentes procedentes de China, lo que provocó un descenso de los costes y que las nuevas instalaciones volvieran a ser rentables, sin necesidad de primas públicas”.
A partir de 2011, la empresa aprovechó la subida del precio de la electricidad para iniciar una nueva vía de negocio con las instalaciones de autoconsumo en el ámbito industrial y agroalimentario y, en menor medida, doméstico; hasta que seis años después retomó la actividad de construcción de parques solares, que se mantiene hasta ahora.
El director comercial de SII señala que, tras la pandemia, “se produjo un incremento del interés por las inversiones en energía solar, tanto de autoconsumo como de venta a red”, que se mantiene hasta ahora y permite a la empresa alcanzar progresivamente los niveles de facturación de los primeros años con una previsión de incremento muy importante de cara al futuro, ya que dispone de proyectos en cartera de gran entidad. Cuenta con una plantilla de 14 personas, a las que se suman “empresas colaboradoras de gran confianza” y presencia en toda España, sobre todo Madrid, zona de Levante y Andalucía, y en Portugal. En la actualidad, el 70% de su negocio procede de las plantas solares, un 20% del autoconsumo industrial y el 10% restante del mantenimiento a través de la filial Mesol.
Por su parte, el director técnico de la firma avanza que esta situación tiene fecha de caducidad, que sitúa en 2 ó 3 años, a lo sumo: “el sector está paralizado en cuanto a grandes instalaciones porque no hay puntos de conexión. Estamos trabajando en contratos obtenidos hace 5 años, pero no podemos vender nuevos proyectos”.
Nueva línea de negocio
Por ello, avanza la puesta en marcha en breve de una nueva línea de negocio especializada en la acumulación de energía en baterías, lo que permite contar con una solución de emergencia ante fallos como el ocurrido el pasado mes de abril. “Necesitamos que España cuente con una regulación en esta área, como ya existe en otros países de Europa y que contemple pagos de capacidad, es decir, ayudas a la instalación de estas baterías, que permitan su gestión hasta que sean necesarias en un momento de caída de la red eléctrica o descensos de producción”, explica el director comercial de la compañía.
Una de las opciones de negocio en la que trabajó SII durante los ejercicios de parón energético por la crisis del año 2008 fue su expansión internacional y, concretamente, a la República Dominicana. “Era demasiado pronto por el nivel de desarrollo de la energía solar en el país, pero creamos la empresa y obtuvimos los permisos necesarios para implantarnos, lo que nos ha permitido ahora agilizar el inicio de la actividad y contar con puntos de conexión para más de 200 megavatios de cara a los próximos años”, explica David Conrado Choya.
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