Una de las metas de la nueva etapa de Cecale es anteponer los intereses generales sobre los de las patronales provinciales, un aspecto sobre el que su presidente, Santiago Aparicio, apunta: “hay 9 sensibilidades y 9 criterios diferentes, y aunar esas voluntades es complicado. Pero las provincias tienen que entender que por encima de las organizaciones territoriales está Cecale y tenemos competencias muy diferentes. Aquéllas principalmente dan servicios y asesoramiento, mientras que la Confederación es un lobby. Aparte de eso, es el referente en Castilla y León en temas de negociación con el Gobierno regional, con los sindicatos y con este tipo de instituciones”.
La crisis interna en Cecale contribuyó a la dimisión de su anterior dirigente y colocó a Aparicio en la Presidencia, un cargo que ocupó en funciones durante 6 meses. Elegido en marzo cómo máximo responsable de la patronal con una amplia mayoría, su mandato comienza con varios objetivos fundamentales, entre lo que sobresalen recuperar la unidad y cuadrar las cuentas. Perteneciente al sector del comercio y las energías renovables y presidente de la patronal soriana, este empresario considera que en Castilla y León “no hay un sentimiento de comunidad como ocurre en otras regiones”.
Aparicio entiende que muchos empresarios dejarán de sentirse representados en Cecale si se mantienen las disputas cainitas: “la verdad es que la imagen que hemos dado es lamentable. Por ello, hice autocrítica y pedí perdón hasta en 3 ocasiones en mi discurso tras la elección, porque nos hemos dedicado a otra cosa distinta de la que nos teníamos que ocupar. Nos hemos centrado en disputas internas en lugar de defender los intereses generales de las empresas y los empresarios de Castilla y León”.
Plan de viabilidad
Cecale trabaja en el plan de viabilidad al que podrán aportar sus comentarios las asociaciones provincias y sectoriales. “Con esas propuestas, lo aprobaremos definitivamente. Más adelante, vamos a encargar también una auditoría externa sobre la gestión de la Confederación en los últimos tiempos. Dependiendo de lo que determine, se tomarán las medidas convenientes”, señala Aparicio que pretende extrapolar la gestión que desarrolla en la patronal soriana, “muy empresarial y con total y absoluta transparencia en todos los ámbitos”. En este sentido, afirma: “creo que hay que gestionar Cecale como si fuera una empresa”.
El presidente de Cecale señala también cuál es a su juicio la razón de la situación económica de la entidad: “en ocasiones, se produce un exceso de confianza en una serie de técnicos, como con el anterior secretario general, que lleva a una situación como la que está viviendo en este momento la patronal. Por ello, entendemos que hay que aplicar una gestión empresarial, igual que la que se desarrolla en nuestro propio negocio. Debemos depositar esa confianza en nuestros directivos y empleados, pero con una supervisión mayor que la que hemos efectuado hasta ahora, y ése es el cambio sustancial a emprender”.
En cuanto a la posible depuración de responsabilidades, explica: “si hay que pedir reclamaciones a los gestores, se hará; incluso si yo también la tengo, pues yo era vicepresidente en la anterior etapa, o a cualquier miembro de la Junta Directiva. Hasta que no tengamos las conclusiones de la auditoría no tomaremos ninguna decisión”.
Internacionalización
Aparicio preside la Comisión de Internacionalización de la patronal, que ha puesto su punto de mira este año en Latinoamérica. En este sentido, comenta que el futuro de las empresas de Castilla y León pasa por las exportaciones al Cono Sur: “compartir una misma lengua ayuda mucho y a las empresas de Castilla y León, que son pequeñas y medianas en su gran mayoría, les cuesta mucho salir a otros mercados. Comunicarse en un mismo idioma contribuye en muchas ocasiones a dar ese paso. Por eso Latinoamérica es la salida natural”.
Administración
Aunque considera que Castilla y León es una de las comunidades autónomas que mejor están, el presidente de Cecale apunta que entre las reformas pendientes, se encuentra la de la Administración regional y recuerda que la patronal elaboró un estudio en el que se reflejaba que más de 200 fundaciones y empresas públicas en la comunidad autónoma eran deficitarias. “Eso hay que corregirlo de alguna forma. Hay que adelgazar en algún sentido la Administración regional, no con funcionarios de oposición, sino reduciendo el personal no laboral que está contratado. Castilla y León es la segunda región de España en número de funcionarios per cápita, por detrás tan sólo de Extremadura. Llevando a cabo esta reforma, se podrían obtener unos recursos para financiar otros ámbitos, como sanidad, educación y servicios sociales, que son básicos y fundamentales”, detalla.
Asimismo, considera que la reforma de la Administración es un tema pendiente: “el Gobierno central y los autonómicos lo tienen que estudiar, porque es importante. No podemos seguir manteniendo una Administración mastodóntica. No es posible que Castilla y León tenga 35 funcionarios, de oposición y de personal no laboral, por cada 1.000 habitantes, cuando comunidades autónomas como Cataluña tienen 12 y los países nórdicos 7. Debe darse una reforma profunda”.
En este sentido, el presidente de Cecale puntualiza: “eso no es estar en contra de los funcionarios, que es una profesión muy respetable, pues de ellos dependen muchos de los temas que deben resolverse a nivel de ciudadanía y de empresarios en todos los ámbitos. No estoy hablando de estos últimos, sino del personal no laboral que se contrata directamente a dedo por las administraciones. Lo que hay que examinar son las fundaciones y empresas públicas que no tienen ninguna rentabilidad para la sociedad”.
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