El 43% de las empresas españolas cobra a más de 85 días, un porcentaje que en mayo sólo alcanzaba el 33%. Este es el plazo máximo establecido en la reforma de la Ley de Morosidad para 2011, en el marco de un calendario transitorio para alcanzar los 60 días en 2013. De acuerdo con el último informe elaborado por Crédito y Caución y el Instituto de Empresa para el Observatorio de Riesgo de Crédito impulsado por su Cátedra Cash Management, sólo el 33% de los negocios nacionales cumplía en octubre con los 60 días, frente al 42% registrado hace 5 meses.
A pesar del empeoramiento de los plazos señalados por el estudio, el 12% de las compañías consultadas asegura que el nuevo marco normativo ha provocado una reducción de sus plazos de cobro. Para un porcentaje muy similar, el 14%, el efecto ha sido el contrario: un aumento de sus necesidades de financiación. Para el 74% restante, el impacto ha sido poco significativo. Además, más de la mitad de las empresas españolas no aplica nunca los intereses de demora que permite la ley ante un incumplimiento de pago desde el año 2004.
Gestión de riesgos
La mitad de las sociedades (49%) reconoce haber sufrido impagos significativos, por lo que ha extremado el análisis de los clientes con los que trabaja. En la misma línea, 3 de cada 4 empresas españolas creen que la gestión de crédito en España crecerá en importancia en el futuro.
En los últimos 6 meses los departamentos de riesgos han ganado peso frente a los comerciales y financieros a la hora de determinar la entrada de clientes a la compañía. Sin embargo, 2 de cada 3 empresas no cuentan aún con un Comité de Riesgos, cifra sensiblemente inferior en el caso de pymes. Los informes comerciales son la herramienta más utilizada para gestionar los riesgos, seguidos del seguro de crédito.
Castilla y León Económica