Grupo Lince cumple 40 años con el foco puesto en la innovación, la inclusión y el desarrollo territorial. Su última incorporación tecnológica es la fabricación aditiva, también conocida como impresión 3D profesional, “una tecnología que nos permite ofrecer soluciones técnicas avanzadas desde nuestras instalaciones en Valladolid, con un enfoque industrial, sostenible y socialmente responsable”, señalan en la organización.
A través de su Centro de Fabricación Aditiva Social (CFAS) -el primero de su tipo en Castilla y León- produce piezas técnicas para sectores como el industrial, aeroespacial, sanitario, alimentario, ortoprotésico y de accesibilidad. Esta instalación representa una clara diversificación respecto a los sectores tradicionales del empleo protegido y posiciona a Grupo Lince como un proveedor tecnológico capaz de responder a las necesidades específicas de cada cliente.
Producción más eficiente
La fabricación aditiva permite producir piezas de forma más eficiente, con menos residuos y sin necesidad de grandes tiradas. Esto encaja con las demandas de sectores que requieren series cortas, prototipado rápido, adaptaciones específicas o utillajes personalizados. En este campo, Grupo Lince se erige como un aliado que combina innovación industrial y responsabilidad social.
Entre los productos que desarrolla en esta nueva actividad destacan los prototipos para validación técnica y diseño; utillajes y piezas para la industria, incluidos envases, soportes y componentes para logística interna; piezas funcionales para maquinaria industrial; componentes personalizados para líneas de producción; carcasas para dispositivos electrónicos; y elementos para sectores sanitarios y para accesibilidad universal. Además, ofrece servicios de escaneado 3D, modelado digital y réplica precisa, con aplicaciones que van desde la ingeniería hasta el diseño y la personalización de regalos.
Tecnología y empleo inclusivo
La fabricación aditiva en Grupo Lince se realiza íntegramente en Valladolid, en un entorno de trabajo que combina tecnología avanzada con empleo inclusivo bajo el formato de Centro Especial de Empleo. De este modo, la entidad facilita a sus clientes el cumplimiento de la Ley General de Discapacidad (LGD, antigua LISMI).
“Este modelo nos permite generar valor económico, social y territorial, alineado con los principios de la economía circular y el desarrollo sostenible. Nuestro compromiso ha sido reconocido con el Premio a la Captación y Fidelización de Talento en los Premios de Automoción y Movilidad de Castilla y León. También hemos obtenido el distintivo bronce de EcoVadis, que avala nuestro desempeño en sostenibilidad ambiental, social y ética”, enfatizan los responsables de Grupo Lince.
Servicios complementarios
De forma paralela a la fabricación aditiva, Grupo Lince desarrolla otras actividades, como limpieza, conserjería, jardinería y actividades industriales y logísticas desde sus instalaciones en Valladolid. En una nave de 3.700 metros cuadrados presta servicios como la gestión documental, digitalización y destrucción certificada; comunicación y marketing postal, incluyendo envíos, ensobrados y manipulados; y servicios auxiliares de industria, como montaje de kits, tareas de picking y preparación de pedidos.
“Esta diversificación nos permite ofrecer soluciones integrales a empresas e instituciones, siempre con el compromiso de generar empleo inclusivo, permitiendo que más de 750 profesionales -el 87% de ellos con algún tipo de discapacidad- formen parte activa de un proyecto que combina eficiencia, innovación y propósito”, subrayan desde la Dirección de Grupo Lince.
Más información en el número de diciembre de la revista Castilla y León Económica