“El Sistema Nacional de Atención a la Dependencia (SAAD) se destruye por inanición”, aseguró la Asociación Estatal de Gerentes y Directores de Servicios Sociales tras analizar los datos correspondientes al mes de agosto, cuando 6 comunidades autónomas y las ciudades de Ceuta y Melilla presentaron resultados negativos con respecto a julio. De hecho, sólo Extremadura y Galicia ganaron beneficiarios, mientras que Castilla y León, que ha sido “modélica” en el desarrollo de la ley, perdió 853 dependientes. Aragón, por su parte, retrocede a datos de 2010.
La organización cree que la explicación más probable es que esos beneficiarios hayan fallecido, aunque en tal caso denuncia que no se haya destinado el ahorro que eso supone a dar una prestación o servicio a una de las 239.097 personas a las que se les ha reconocido el derecho pero no se les ha dado la ayuda.
Así, advierte que se mantiene la tasa de reposición de beneficiarios, es decir sólo se atiende a los que están en el sistema, “recortando las prestaciones, reduciendo horas de servicio y aumentando el copago”, pero a los que están en la lista de espera “no se les garantiza el derecho”.
Europa Press / Castilla y León Económica