La Junta de Castilla y León cerró este miércoles, 5 de octubre, el ejercicio económico 2016, aproximadamente un mes antes de lo que ha sido habitual en los últimos años, en los que cerró el gasto con fecha de 5 de noviembre.
Según recordó Pilar del Olmo, consejera de Economía y Hacienda, se trata de una fecha “un poco adelantada” respecto el cierre del gasto efectivo de otros años ante la necesidad de intentar cumplir el objetivo de déficit de 2016, que está presupuestado aún en un 0,3% a pesar de que el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) del mes de abril dio el visto bueno a ampliar el margen al 0,7%, que aún no ha entrado en vigor.
“Hoy por hoy no está aprobado”, asumió la consejera de Economía y Hacienda, quien recordó que el Congreso de los Diputados va a debatir una Proposición de Ley del PP para cambiar la Ley de Estabilidad y modificar definitivamente los objetivos de déficit de las comunidades autónomas para 2016, por lo que expresó su deseo de que al finalizar el año sea de ese 0,7% informado en abril y que en Castilla y León supondría unos 220 millones de euros más.
Hasta entonces, la Junta de Castilla y León optó por cerrar este miércoles el ejercicio económico de 2016, como hizo ya el Gobierno de la nación el pasado mes de julio y como han hecho también otras comunidades autónomas, que lo han cerrado “incluso antes” que la comunidad castellana y leonesa.
Del Olmo apeló en todo momento a la necesidad de controlar el gasto para que no exceda el objetivo de déficit y favorecer además el pago en plazo a los proveedores que se disparó, según recordó, cuando Castilla y León incumplió el margen de déficit en 2015 ya que retrasó las autorizaciones de deuda de la comunidad autónoma. La consejera justificó también la necesidad de controlar el gasto ante el incremento del gasto sanitario que se suele dar todos los años al finalizar el ejercicio.
Gastos ordinarios
Según aclaró la consejera, esta decisión no afectará a los gastos ordinarios de funcionamiento de la comunidad autónoma, que se tramitarán con normalidad, y tendrá su mayor repercusión en los capítulos 4, 6 y 7 del Presupuesto de la Junta para 2016 con la orden, publicada este miércoles en el Bocyl, de no tramitar nuevos gastos en esos capítulos si bien hasta el 31 de octubre se ejecutarán los ya aprobados.
Del Olmo precisó que, como en años anteriores, hay “importantes excepciones” que no entran en esa restricción del gasto, como los derivados de la PAC, las prestaciones de la Gerencia de Servicios Sociales ligadas a la dependencia o a la Renta Garantizada de Ciudadanía, el gasto sanitario o los de educación relacionados con los conciertos o con las universidades, “además de cualquier otra excepción que haya que autorizar”.
De este modo, descartó que en Castilla y León se pueda producir el bloqueo que ha tenido el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte para la celebración del Premio Cervantes tras el cierre del ejercicio económico a nivel nacional.
Preguntada si esos proyectos pendientes pasarán al próximo presupuesto, cuando se apruebe, Del Olmo aclaró que todo dependerá de las necesidades de Castilla y León en 2017.
Castilla y León Económica / Europa Press
