La rebaja completa del IRPF, que entró en vigor en enero de 2016, tendrá un efecto muy desigual por comunidades autónomas, debido por un lado, a las diferencias de renta entre ellas (la rebaja es mayor entre las rentas más bajas) y, por otro lado, a los cambios fiscales que los gobiernos autonómicos han introducido a su vez en este impuesto.
En Castilla y León, la rebaja será del 6,8%, por encima de la media nacional, situada en el 3,74%.
Europa Press