El nuevo Plan PIVE sube las ayudas a 3.000 euros para familias numerosas

Este programa estará vigente durante 12 meses
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El nuevo Plan PIVE de ayudas a la compra de automóviles contiene como principal novedad la ampliación de las ayudas a 3.000 euros, 1.500 euros aportados por el Ministerio de Industria y otros 1.500 por las marcas, para las familias numerosas que compren un vehículo de más de 5 plazas, con un precio antes de IVA no superior a 30.000 euros.

La segunda fase del Plan PIVE, dotada con 150 millones de euros, permitirá la sustitución de entre 145.000 y 150.000 turismos y vehículos comerciales ligeros por otros automóviles más eficientes y con menores consumos de carburante.

12 meses

El programa entrará en vigor este sábado, si bien el sistema informático y de reserva del presupuesto estará operativo el lunes 4 de febrero. El plan estará vigente durante 12 meses o hasta el agotamiento de los fondos.

Como en el PIVE inicial, las ayudas se sitúan en 2.000 euros, 1.000 aportadas por el Gobierno y 1.000 por la marca, salvo en el caso de familias numerosas que compren coches de 6 plazas o más, que se beneficiarán de una subvención de 3.000 euros.

Los vehículos incluidos el programa de ayudas son turismos clasificados como A o B en la categoría energética del IDAE con un precio de 25.000 euros, así como eléctricos, híbridos, híbridos enchufables o propulsados por GLP y Gas Natural, sea cual sea su coste. También afecta a vehículos comerciales ligeros.

Antigüedad

Otra novedad del plan, tal y como avanzó la pasada semana Mariano Rajoy, presidente del Gobierno, es que se reduce de 12 a 10 años la antigüedad exigida al turismo que se retira de la circulación, y de 10 a 7 años para los vehículos comerciales.

Castilla y León Económica / Europa Press

1 comentario

  1. Todo esto es cada día más indignante, ¿por que hay que dejar fuera de la circulación a los vehículos con tales o cuales años?
    Habrá que dejar fuera de la circulación lo que no sirva, por que por la misma regla de tres, habría que sacar de la circulación a la mayoría de las personas que tiene en su cometido el ahorro (no de gasolina o gasóleo) si no de el dinero de todos los administrados (por mal aprovechamiento del combustible que emplean “dinero”, para poder comer todos los días).
    Dejen se de subvenciones, para ricos y para pobres. ¿quien con una familia numerosa puede comprarse un coche de 30.000 éuros?, si es que puede, es que es pudiente y por lo tanto ¿por que se le bonifica?.
    Para terminar, si hace falta crear puestos de trabajo, dejen que los vehículos y muchas más cosas ÚTILES dejen que sigan haciendo su función, y que los pequeños achaques los reparen los “médicos de coches”, como se hacía unas décadas atrás que es donde nos han llevado los gobiernos socialistas; no queramos ser más papistas que el Papa, y pretendamos ser los punteros en tecnología, leyes, derechos de todo tipo, cuando en la realidad somos unos tercer mundistas y estamos la mayoría, anclados en la ignorancia.
    Lo que pretenden hacer con el “sufrido vehículo” no tardará en proponerse para los ancianos, jubilados, y enfermos (que en el momento que no contemos para sacar una mayoría son exterminarán, como en décadas pasó; eso sí en aplicación de la legalidad vigente.

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