Fibras Textiles Sánchez se reinventa para convertirse en Mascarillas Béjar por el coronavirus

La empresa salmantina prevé multiplicar su facturación por 20 en un año hasta los 30 millones en 2020
Alberto Sánchez, director general de Mascarillas Béjar.
Alberto Sánchez, director general de Mascarillas Béjar.

Fibras Textiles Sánchez nació hace 25 años como una empresa familiar dedicada a la fabricación de almohadas y colchones con un “crecimiento sólido e interesante” en estos años, a pesar de que el “dumping chino, con la caída de los aranceles en toda Europa y el libre acceso al mercado asiático, nos hizo mucho daño”, explica Alberto Sánchez, director general y de Fábrica de esta empresa familiar ubicada en Béjar (Salamanca), quien prosigue: “nos costó muchísimo sobrevivir a aquello, pero con esfuerzo, habíamos llegado hasta aquí”.

Y entonces llegó 2020 y la pandemia del Covid-19, que supuso una nueva etapa para la empresa bajo la marca Mascarillas Béjar, creada con el objetivo de aprovechar la demanda del mercado y producir estos EPIs, al tiempo que inicialmente se mantenía la actividad tradicional.

“Para nosotros, la crisis del coronavirus ha supuesto una dramática oportunidad de cambio, adaptación y acierto empresarial. Es dramática porque no es nada agradable que una desgracia como la que ha sucedido con el virus y que se cierne sobre nosotros todavía, sea nuestro motivo de cambio y de éxito empresarial. Pero también es cierto que de todas las grandes crisis se aprenden modelos productivos nuevos y, junto a los convulsos tiempos trágicos, nacen nuevas oportunidades que nos permiten avanzar”, detalla el director general y de Fábrica de Fibras Textiles Sánchez, quien subraya que para la localidad salmantina de Béjar esta situación ha supuesto “el renacimiento de una pequeña villa tradicionalmente textil, que se vio envuelta en el aislamiento y la crisis del dumping asiático y en la llamada España Vacía y que, gracias a esto, ha recuperado empleo, dignidad, futuro y esperanza”.

Inversión

Desde la adquisición de la primera máquina para la producción de mascarillas el pasado mes de marzo, la compañía ha invertido más de 2 millones de euros y multiplicado por 10 su plantilla, que en la actualidad alcanza las 70 personas de forma directa y que llega a más de 100 puestos de trabajo si consideramos los empleos indirectos. De igual forma, el crecimiento de su cifra de negocio ha sido exponencial, al pasar de 1,5 millones en 2019 a una previsión de alcanzar los 30 millones en 2020, incluidas las ventas de su distribuidora comercial Mahupa.

“La apuesta es tan importante y tan decisiva en nuestra renovación que hemos desmantelado la zona de almohadas y colchones, porque vamos a apostar por este mercado como algo sólido y a largo plazo”, avanza Sánchez, que detalla que su objetivo es instalar la fabricación de este producto estratégico para la sanidad europea en España, “de tal manera que, cuando pase la pandemia y el consiguiente uso masivo y obligatorio de mascarillas por la población, nos convirtamos en la referencia de la nueva industria europea para hospitales, centros de salud, farmacéuticas y laboratorios, todos ellos consumidores habituales de este producto y que se vieron obligados a comprar en China o Taiwán durante años por la crisis del sector en Europa. No queremos volver a depender de terceros países, y creo que la UE está volcada, y con mucho acierto, en este sentido con empresas como la nuestra”, apunta el ejecutivo, miembro de la segunda generación de esta compañía familiar.

Innovación

La innovación es un aspecto fundamental en la evolución de Mascarillas Béjar, ya que ha desarrollado junto a Colortex la nueva mascarilla NAN300, que garantiza la protección desde dentro afuera y es altamente resistente a las salpicaduras externas, al tiempo que mejora la comodidad y la transpirabilidad gracias a un tejido nanotecnológico de comportamiento orgánico e inteligente, que le otorga la máxima protección; además concede a la mascarilla una sensación de estructura liviana y flexible y es reciclable y lavable.

“Sobresale cómo se adapta este tejido a las dimensiones, plegado y forma de la quirúrgica clásica, pero con textura de 4 capas”, aclara Sánchez, que también destaca el buen comportamiento de estos EPIs con las tinturas y la impresión a todo color de la capa exterior, lo que garantiza “poder trabajar con diseños, estampados y todo tipo de cuatricromías para que los diseñadores españoles que nos acompañan en este lanzamiento en exclusiva, como son Devota & Lomba, Roberto Torreta, Ion Fiz y Ana Locking, puedan obtener la calidad, protección y respeto a sus creaciones que buscan”.

Más información en el número de noviembre de Castilla y León Económica

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Información sobre la protección de datos:
· Responsable de los datos: Ediciones La Meseta, S.L.
· Finalidad: Enviar un comentario
· Derechos: Tienes derecho a acceder, rectificar o suprimir los datos, así como otros derechos como es explica en la política de privacidad.
· Información adicional: Puedes consultar la información adicional y detallada sobre la protección de datos aquí.

Noticias relacionadas

Ir al contenido