El presupuesto de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente para 2016 alcanza los 562,32 millones de euros, un 1,49% más que el año anterior, de los que 31,65 millones corresponden a los proyectos del Área de Vivienda, Arquitectura y Urbanismo. El objetivo de este capítulo es reforzar su contenido social para atender las situaciones de necesidad y ayudar a quienes tienen más dificultades en el acceso a un hogar. Así, el Departamento dirigido por Juan Carlos Suárez-Quiñones apuesta por impulsar el alquiler y la rehabilitación de inmuebles, aspectos a los que se destinarán 23,45 millones de euros.
Respecto al primero de estas áreas, la Consejería de Fomento y Medio Ambiente convoca en 2016 ayudas al alquiler por un importe de 11,2 millones; mientras que la constitución de un parque público de viviendas de alquiler contará con una partida de 2,37 millones de euros. Esta iniciativa pretende integrar en un sólo catálogo los inmuebles de la Junta y los de ayuntamientos y entidades financieras.
En cuento a la rehabilitación, regeneración y renovación urbanas, el Gobierno regional contempla una dotación de 15,52 millones destinados, por una parte, a las subvenciones previstas en esta materia por un importe de 7 millones de euros y a la implantación del informe de evaluación de edificios; y por otra, a la financiación de las 22 Áreas de Regeneración y Renovación Urbana que se desarrollan en la actualidad por 11,78 millones.
Arquitectura
El presupuesto de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente para 2016 contempla también una partida de 7 millones de euros para el Área de Arquitectura. Este montante, que supone un incremento del 40% respecto al ejercicio anterior, permitirá mantener la colaboración con las entidades locales en la rehabilitación del patrimonio urbano y arquitectónico de Castilla y León y atender el compromiso de cofinanciar con 2,7 millones de euros iniciales el Palacio de Congresos y Recinto Ferial de León.
A estas cifras, se suma la partida de cerca de medio millón de euros comprometida en el Área de Urbanismo, destinada fundamentalmente a la producción cartográfica y al inicio del proceso de elaboración de la normativa de ordenación urbanística básica de los ayuntamientos menores de 500 habitantes.
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