La siniestralidad laboral se mantiene como un problema social, económico y personal de primera magnitud. Por ello, en los últimos años ha sido una prioridad para la Consejería de Economía y Empleo de la Junta articular políticas tendentes a reducir al máximo este tipo de accidentes. Las medidas adoptadas han conseguido una mejora objetiva en los últimos ejercicios, con una evolución positiva, al menos desde el punto de vista cuantitativo. Esto ha sido posible, en gran parte, gracias a los acuerdos en materia de prevención de riesgos laborales alcanzados por la Administración autonómica y los agentes sociales y económicos.
El indicador que mejor refleja la eficacia de esas acciones es la reducción del número de accidentes de trabajo con baja registrados en la comunidad autónoma; y más aún la disminución del índice de incidencia (número de percances por cada 1.000 trabajadores con las contingencias profesionales cubiertas), que pone de manifiesto el retroceso de la siniestralidad al margen del momento en que se encuentre la actividad económica.
Al analizar los datos estadísticos del último cuatrienio se constata el paulatino retroceso de la siniestralidad laboral. Así, en 2009 el acumulado enero-octubre alcanzó los 29.584 percances, incluidos los in itinere; en 2010 descendieron hasta los 27.466; el pasado ejercicio cayeron hasta los 23.314 y en el presente año se registra una notable disminución hasta situarse en 18.264 accidentes.
En octubre de 2012, el último con datos, se registraron 1.760 accidentes de trabajo con baja en jornada laboral en Castilla y León. De ellos, 1.728 son leves, 30 graves y 2 mortales. En comparación con el mismo mes de 2011, la reducción fue de 307 percances con baja (-14,85%); mientras que los siniestros con resultado de muerte pasaron de 10 a 2 (-80%). Como contrapunto, se observó un aumento de los accidentes graves, que se duplicaron, al pasar de 15 en octubre de 2011, a 30 en el mismo mes de este año.
Evolución
En el período enero-octubre 2012 se produjeron en las 9 provincias de la región 16.539 accidentes de trabajo con baja en jornada laboral, con 16.335 leves, 181 graves y 23 fallecidos. En esos 10 meses se registraron 4.833 siniestros con baja menos que en los mismos meses de 2011, lo que supone una reducción del 22,61%. En todos los ámbitos se observan retrocesos, al descender un 22,67% los percances leves, un 15,42% los de carácter grave y un 30,3% menos los mortales (10 fallecidos menos). A estas cifras hay que sumar los 217 accidentes in itinere menos (-21,47%) que en el período equivalente del año anterior, hasta situarse en 1.725.
Por sectores
Por sectores, en construcción se produjeron 1.336 siniestros menos (-35,86%), cayeron 1.446 en industria (-23,07%), 1.904 menos en servicios (-19,07%) y un retroceso de 147 en el sector agrario (-10,55%). Asimismo, en todas las provincias disminuyó la accidentalidad.
Castilla y León Económica
Enhorabuena al Consejero del músculo por los datos estadísticos. Otra cosa sería que además de estar la mayor parte de las personas en paro encima se produjesen más bajas o incidencias. Además del temor a solicitar la baja por despido. Particularmente les diré que llevo casi 5 años trabajando en Castilla y León y me hicieron el reconocimiento a los 3 años y medio desde que me incorporé y ni curso de formación ni nada una fotocopia para que lo lleyese y arreando.