El anuncio de puesta en marcha de un segundo Plan PIVE de incentivos de compra de vehículos por parte del Gobierno ha sido acogido con satisfacción por la patronal del sector. No en vano, la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac) estima que tendrá un impacto sobre la economía española de más de 2.000 millones de euros.
Estos 2.000 millones de euros se suman a los 930 millones en los que la patronal de fabricantes ha cifrado el impacto económico del primer Plan PIVE, en vigor desde el 1 de octubre de 2012 hasta el pasado 10 de enero, cuando se agotaron sus fondos.
Ventas de 150.000 unidades
El Plan PIVE inicial, que contó con 75 millones de euros de presupuesto, ha generado una recaudación fiscal de 296 millones de euros, al tiempo que ha ayudado a mantener o generar 4.500 empleos y a contener el IPC en 0,15 puntos. Con los 150 millones de este segundo programa se calcula que propiciará la adquisición de 150.000 vehículos.
En cuanto a la actividad de la industria española, gracias al primer PIVE se ha elevado la producción de coches en 26.000 unidades, de las que 6.000 aproximadamente han correspondido a demanda nacional.
40 millones para vehículos comerciales
Las asociaciones del sector indican que la dotación de 150 millones de euros del nuevo PIVE y de 40 millones de euros del plan para vehículos comerciales “contribuirá a generar mayores impactos en la economía española y ayudará al mantenimiento y la creación de empleo”.
El sector del automóvil considera que el Plan moderará la caída de ventas en 2013 y promoverá el crecimiento de las entregas de los modelos más eficientes, así como el rejuvenecimiento del parque español, al tiempo que inyectará una dosis de confianza en la sociedad española.
Castilla y León Económica/ Europa Press
