Creada en 1974 por 17 agricultores con el objetivo de almacenar sus cosechas para venderlas en las mejores condiciones posibles, la vallisoletana Cooperativa Agrícola Comarcal del Pisuerga está formada en la actualidad por 154 socios ubicados en su mayor parte en la zona de la Denominación de Origen Cigales y del Valle Esgueva, así como 3 profesionales responsables de la compraventa de productos, la administración y la gestión del almacén.
Las instalaciones de la cooperativa se encuentran en una parcela de cerca de 22.300 metros cuadrados en la que se ubican 7 silos, construidos en 1974 y restaurados en la pasada campaña, con capacidad para 11.000 toneladas; 2 naves destinadas a almacenamiento, con 7.000 toneladas cada una; y otra para la selección de semillas, que dispone de una nueva seleccionadora adquirida el pasado año, que permite una producción de 12 toneladas a la hora. Se completa la sede de la sociedad con la oficina y el salón de reuniones.
“El pasado ejercicio se repararon todos los transportadores verticales de los silos y se cambió la seleccionadora por otra con mayor rendimiento; mientras que este año está presupuestado el refuerzo de una de las naves y la sustitución de parte de la valla”, avanzan los responsables de esta cooperativa, que alcanzó una cifra de negocio de 10,4 millones de euros en 2024, campaña en la que la sociedad comercializó 31.000 toneladas de productos, un 22,6% más que el ejercicio anterior. “Las previsiones para este ejercicio apuntan a un crecimiento del 20% en la cifra de negocio, dependiendo de la evolución del mercado, y algo más en la comercialización de productos”, comentan desde la sociedad.
Falta de relevo generacional
Los responsables de la Cooperativa Agrícola Comarcal del Pisuerga califican la situación actual del sector como de “nula rentabilidad” y destacan que existe “poco relevo generacional. Se nota la falta de compromiso, poca fidelidad de los socios, sobre todo de los jóvenes, y falta de espíritu cooperativo. Desde la empresa intentamos revertir esta situación con un trato muy cercano, casi personalizado, y una gestión eficiente”, subrayan.
Más información en el número de noviembre de la revista Castilla y León Económica