Copasa, con sede en Salamanca, inició en 2011 la comercialización de los lechazos procedentes de las explotaciones de sus 940 socios bajo el amparo de la indicación geográfica protegida (IGP) Lechazo de Castilla y León. Este servicio se suma al que se desarrolla desde 2007 para la venta de ganado vacuno bajo la marca de garantía Ternera Charra y a otros como la producción de piensos compuestos; asistencia técnica veterinaria con asesoramiento sobre alimentación, reproducción y manejo del ganado; comercialización de productos zoosanitarios; gestión de residuos; montaje de instalaciones ganaderas; suministro de gasóleo; pienso para animales de compañía; y diseño y venta de complementos minerales para rumiantes, entre otros.
Control de trazabilidad y etiquetado
Durante el pasado año, la cooperativa presidida por Luis Martín también implantó un nuevo sistema de control de trazabilidad y etiquetado en la fábrica de piensos que posee en Tejares (Salamanca) para adaptar su funcionamiento a la legislación vigente. “También ofrecemos a los socios todas las materias primas que necesitan las explotaciones que disponen de instalaciones propias de molinería, así como aditivos y complementos, que se acompañan de un servicio de actualización de precios y formulación a medida”, detalla Víctor Rodríguez, gerente de Copasa. La cifra de negocio de la cooperativa superó los 9 millones de euros en 2011, con una producción de 34.000 toneladas de pienso, una cifra satisfactoria “en un año tan complicado como el pasado, con el sector agropecuario, sobre todo el porcino ibérico, sumido en una profunda crisis por el alto precio de las materias primas”, según explica Martín.
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