Cuando uno viaja de Salamanca a Ledesma, en pleno Campo Charro, va pensando en disfrutar del paisaje, de bellas dehesas pobladas de encinas, tal vez ganado bravo y cerdos ibéricos si es período de montanera, pero lo que no espera es encontrarse con la única fábrica española de combustible nuclear con el que se suministran las centrales nucleares, propiedad de la empresa pública Enusa Industrias Avanzadas. Se trata de una de las cinco instalaciones de estas características existentes en Europa occidental (las cuatro restantes se encuentran en Francia, Reino Unido, Suecia y Alemania).
Nada más comenzar la entrevista, Javier Montes Navarro, director de la planta desde hace casi una década, a la que lleva vinculado 19 años y que trabaja en Enusa desde hace más de 30, se apresura a aclarar que “no se trata de una central nuclear, como algunas personas del entorno piensan. Nosotros fabricamos la materia prima de las centrales nucleares, procesamos uranio enriquecido y por lo tanto somos una instalación nuclear que se rige según el reglamento de instalaciones nucleares y radiactivas”.
Enusa Industrias Avanzadas, que inició la construcción de esta planta en 1983 -entró en explotación en 1985- produce en Juzbado 300 toneladas de uranio al año (una central nuclear utiliza en una recarga entre 25 y 30 toneladas), de las que exporta el 60% a Europa, principalmente a Francia, Bélgica y Alemania en la actualidad (y hasta fechas recientes a Suecia y Finlandia). Asimismo, da empleo a 350 personas, de las que un conjunto importante trabaja a tres turnos para cubrir las necesidades de producción de la fábrica, salvo paradas de mantenimiento.
Tecnología
El Grupo Enusa facturó 370 millones de euros en 2015, de los que 115 millones correspondieron a su área de producción de combustible, por lo tanto la mayor parte de esa última cifra se generó en Juzbado. Montes Navarro matiza que por el tipo de fábrica y el producto que de ella sale, “somos una empresa muy tecnológica”. Quizá por eso la compañía destina a I+D+i en su negocio de combustible un 5% anual de su cifra de ventas. Y además, cada año se ejecutan inversiones en la planta de entre cuatro y siete millones de euros para su modernización.
Más información en el número de diciembre de Castilla y León Económica.
