Mahou San Miguel invierte más de 31 millones en su fábrica de Burgos en la última década

La planta burgalesa produce 2,1 millones de hectolitros de cerveza al año, con una amplia gama de 71 referencias
César Javier Rodríguez, director de la fábrica de Mahou San Miguel en Burgos.
César Javier Rodríguez Muñoz, director de la fábrica de Mahou San Miguel en Burgos, en las instalaciones.

¿Quién no conoce o al menos ha oído hablar de Mahou y San Miguel? Son probablemente las 2 marcas de cerveza más conocidas de España, que en el año 2000 se unieron en una sola empresa que concentra una cuota del 34% del mercado español del consumo de esta bebida tan popular en nuestro país. De hecho, España es el cuarto mercado europeo en ingesta de este producto. Otro dato que da idea de su fortaleza y su músculo es que el 70% de la cerveza española que se exporta al exterior es de esta compañía familiar, que comercializa su amplísimo catálogo de referencias en más de 70 países.

Lo que quizá ya no sepa tanta gente es que en Burgos existe una planta de producción de la firma, de larga tradición, ya que cuenta casi con medio siglo de historia, primero ligada a San Miguel; y ahora como Mahou San Miguel. César Javier Rodríguez Muñoz, su director, nos abre las puertas de este centro, que en la última década ha acaparado inversiones por importe de 31,2 millones de euros en diversos proyectos, como la nueva sala de elaboración, de hace apenas un año.

Ubicación

¿Por qué Burgos? El director de la fábrica de Mahou San Miguel aporta algunas claves de la implantación en la capital castellana y leonesa. Una de ellas es la “excepcional calidad de su agua”, a la que se une su enclave geográfico “envidiable” y la “riqueza de su tejido empresarial”.

Una de las características más destacadas de la planta burgalesa es su versatilidad. Sus líneas de producción pueden apartarse para producir diferentes referencias en un mismo día. De otro modo no sería posible elaborar 23 tipos de líquidos distintos y 74 referencias que salen de estas instalaciones de sus 4 marcas de cerveza: San Miguel, Mahou, Alhambra y Reina.

69.000 botellas a la hora

Rodríguez Muñoz  señala otro de los retos, que no es otro que ser capaces “de abastecer cualquier demanda del mercado desde cualquier centro de producción”. Las instalaciones de Burgos disponen de 4 líneas (latas, barril, botella retornable y botella no retornable), con un ritmo de producción de 69.000 botellas a la hora, para elaborar 2,1 millones de hectolitros al año.

La planta de burgos, que recibe cada año a 6.000 visitantes, cuenta con una plantilla de 130 trabajadores y es una de las 8 fábricas de Mahou San Miguel. Las otras se localizan en Granada, Málaga, Córdoba, Lleida, Tenerife, Madrid y la India, la primera incursión en el extranjero, realizada en 2011, primero con una participación y desde hace 3 años como centro de producción 100% propiedad de la compañía.

Pilares de la gestión

El director de la fábrica burgalesa hace hincapié en los tres pilares sobre los que descansa la actividad de las instalaciones, que son la prevención de riesgos, “porque al final incluso al hablar de industria 4.0, todo son personas, que son el motor de esta factoría”; la ejecución de procesos “más rápidos, versátiles y eficientes”; y la sostenibilidad, “porque la eficiencia ha de ser sostenible”, matiza Rodríguez Muñoz. En este punto, el ejecutivo destaca que en la última década se han reducido un 14% el consumo de agua, un 32% el de energía y un 38% el de emisiones de CO2.

Una máxima de la empresa es trabajar con provedores locales. El 94% de sus 3.000 proveedores son nacionales; un 95% de la malta empleada en sus elaboraciones es española; así como el 60% del lúpulo, del que cabe destacar que una buena parte procede de León.

Una empresa familiar con más de 125 años

Mahou San Miguel, compañía líder del sector cervecero español, cerró 2016 con la cifra de negocio más alta de su historia al alcanzar los 1.220,5 millones de euros, un 3,7% más que en el ejercicio precedente. Además, obtuvo un ebitda de casi 265 millones de euros, un resultado de explotación de 175,3 millones y unas ventas de 16,1 millones de hectolitros -el 15% fuera de España-, de los que 13,5 millones correspondieron a cerveza y 2,6 millones de agua y bebidas a base agua y zumos.

Llaman la atención 2 guarismos registrados en 2016 de esta empresa familiar con más de 125 años de historia que se encuentra gestionada por su sexta y séptima generación: los 77,7 millones de inversiones ejecutadas en el pasado ejercicio y las 218 incorporaciones hasta situar su plantilla en los 3.000 trabajadores.

La compañía llega con sus productos a un total de 19 millones de personas, con 850 distribuidores sólo en la rama de hostelería y 200.000 puntos de venta en nuestro país.

Marcas

Mahou San Miguel posee un amplio portafolio de cervezas nacionales donde destacan, entre otras, Mahou Cinco Estrellas, San Miguel Especial y Alhambra Reserva 1925; además de productos “pioneros en su categoría”, como San Miguel 0,0, San Miguel 0,0 Isotónica y San Miguel ECO, y marcas aptas para celiacos como San Miguel Gluten Free y Mahou Cinco Estrellas Sin Gluten. También tiene una amplia gama de cervezas internacionales, fruto de acuerdos con partners como Carlsberg y Warsteiner, y marcas de agua como Solán de Cabras.

Más información en el número de diciembre de la revista Castilla y León Económica

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