Sólo el 32% de los trabajadores españoles recibe formación adaptada a su entorno laboral, un porcentaje que les sitúa muy lejos de profesionales de países como Alemania (52%) o los nórdicos (70%), quienes más asisten a este tipo de cursos. Por lo general, los idiomas son la categoría más demandada, con 1 de cada 3 peticiones. Le siguen la formación en prevención de riesgos laborales, las habilidades directivas y la ofimática, según datos de Brainers.
Gloria Rasero, directora de la firma, explica que las 2 primeras áreas ganan peso como consecuencia de las nuevas normativas que se introducen en las empresas. “Es el caso de los cursos de interpretación de lenguaje de sordos o el curso de manejo del desfibrilador semiautomático”, indica.
En todo caso, en sólo un año la demanda de formación dirigida a profesionales en activo ha crecido un 30%. Además, según datos de la Fundación Tripartita, el número de empresas españolas que participan en programas de este tipo se ha multiplicado por 12 desde el 2004.
Castilla y León Económica