TecoZam participa en las obras del viaducto sobre los ríos Gállego y Aurín de la Autovía Mudéjar A-23 a su paso por Sabiñánigo (Huesca), de 8,6 kilómetros, que discurre en paralelo a la carretera N-330 y que permitirá mejorar la movilidad en la provincia aragonesa.
El viaducto de Sabiñánigo, que tiene un presupuesto de 97,6 millones de euros y forma parte de un proyecto más amplio con una inversión total de 102,4 millones, está en su fase final de ejecución con más un 80% de los trabajos realizado y supone todo un hito de innovación por su tipología y sistema de construcción. Tiene una longitud de 934 metros, una altura máxima de 50 metros sobre el terreno, un tablero único de 25,1 metros de ancho y cuenta con 11 vanos, 9 de ellos de 90 metros de luz, uno de 75 metros y otro de 49 metros. Este proyecto del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible, a través de la Red de Carreteras del Estado y en colaboración con la UTE Sabiñánigo (Rover y Aldesa), pone al sector de la obra civil español como punto de lanza internacional.
Puente de récords
Según destacan en TecoZam, es la mayor estructura dentro de su tipología en varios aspectos, como la mayor luz de un puente de carretera de múltiplos tramos, con hormigonado in situ del vano integral; mayor vano extremo de un puente construido con autocimbra; mayor autocimbra bajo tablero en longitud de vano; y mayor Voladizo en Avance de una autocimbra.
“Se podría decir que es un puente de récords y se podría incluso nombrar algunos más, pero los récords sólo por sí no interesan. Lo que más interesa es todo el conocimiento desarrollado, en el sentido de romper barreras preestablecidas en un compromiso con la innovación y la sostenibilidad futura. El mayor potencial de esta tecnología es la posibilidad de ahorro muy expresivo de los materiales constituyentes del puente en comparación con las soluciones tradicionales para este rango de vanos”, afirma Iván José Gómez Rojo, presidente de TecoZam.
Autocimbra
El tablero está siendo ejecutado con autocimbra inferior para el núcleo central y carro de vuelos para los voladizos, gracias a la tecnología desarrollada por la compañía zamorana.
El uso de la autocimbra en esta obra es singular y desafía todos los límites establecidos, ya que no es habitual llegar a longitudes de vano de 90 metros con este sistema, que tradicionalmente se utiliza para vanos de hasta 60-70 metros. De hecho, no existe en España ninguno con esa longitud de vano construido con autocimbra y en el mundo sólo hay otro de esta misma longitud de vano en Turquía.
El avance de la autocimbra es complejo y se hace de manera independiente para cada una de las vigas que la componen, lo que permite adaptarse al trazado del tablero, que debe ajustarse a una curvatura y una inclinación variable, dando lugar a un encaje geométrico de notoria complejidad.
Castilla y León Económica
Es sorprendente como para algunas obras hay presupuesto y para otras se las demora por “décadas”, como es el caso de las infraestructuras en la provincia de Burgos. La autovía de Burgos a Logroño, cuanto lleva 15…20..25 años demorándola, o la autovía de Burgos a Soria, o la autovía a Cantabria ( no la falsa por Palencia). Sera porque somos una provincia “mansa” o quiza tonta?