La Unión Regional de Cooperativas Agrarias de Castilla y León (Urcacyl) se ha adherido a un manifiesto redactado por diversos representantes del sector porcino y en el que se reclaman medidas para garantizar el cumplimiento de las normas de calidad en la comercialización de productos bajo la marca ibérica. “El nombre del ibérico es fruto de muchos años de trabajo, en los que los porcentajes del denominado puro apenas han superado el 10% del mercado”, argumentan los firmantes.
El manifiesto asegura que algunas minorías del sector tratan de hacer suyas denominaciones comerciales no contempladas ni normativamente, ni dentro de las denominaciones de origen, con el único fin de apropiarse de la imagen que este ganado ha conseguido dar al nombre ibérico y competir con quienes realmente han contribuido a fijar la imagen de marca.
Los firmantes, que aseguran representar al 90% del sector porcino “con la consiguiente participación en número de empresas, volumen de producción y trabajadores”, consideran inadmisible, más aún en las actuales circunstancias económicas, poner en peligro su subsistencia por una “aplicación irreflexiva” de la normativa que sólo beneficia al 10% del mercado.
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