BNK España trasladó este jueves su sede social a Burgos, ciudad en la que ya contaba con una oficina, además de un delgado en esta provincia de Castilla y León.
Esta filial de la empresa canadiense BNK Petroleum cuenta con varios permisos de investigación en las reservas de gas pizarra del subsuelo del norte de la provincia de Burgos ubicados en Sedano, Urraca y Rojas, este último pendiente de concesión.
La empresa aclara que la plantilla en Castilla y León crecerá a medida que avancen estos proyectos. En una primera fase de exploración para conocer las reservas de gas, tiene previsto emplear a entre 50 y 150 personas por cada sondeo de manera directa e indirecta.
Inversión
El presupuesto en esta etapa puede alcanzar hasta los 250 millones de euros en 5 años, lo que además de la contratación de trabajadores, incluye el pago de licencias municipales, arrendamiento de terrenos y pago de impuestos.
Según BNK España, en ese período se podrán hacer hasta 9 sondeos exploratorios por cada uno de los permisos. Si los resultados obtenidos durante estos años de exploración son positivos, se podría solicitar un permiso de producción, que supone la presentación de un proyecto totalmente nuevo, con su correspondiente estudio de impacto ambiental. La empresa señala que, en este caso, la inversión y el empleo crecería de forma exponencial.
BNK España, explica que según un informe de la consultora Gessal, el norte de Burgos podría contener el 18% del gas pizarra existente en España, con un valor a precio de mercado actual de aproximadamente 100.000 millones de euros, un 10% del producto interior bruto de España.
Castilla y León Económica