Más de 6 décadas de historia contemplan la Bodega Ramón Ramos, la firma familiar fundada por Ramón Ramos Carrillo, asentada en Venialbo (Zamora) y adscrita a la Denominación de Origen Toro, un proyecto familiar arropado por 30 familias más de viticultores que desde sus inicios forman parte de su trayectoria y que aportan uvas de sus 90 hectáreas de viñedos para sumar a las 70 que posee la familia propietaria, de las variedades tinta de Toro, malvasía castellana, verdejo, moscatel de grano menudo, albillo, sauvignon blanc, petit verdot y garnacha. Un crisol de variedades que dan lugar a una amplio portfolio de vinos, agrupados en gamas con más de una decena de referencias.
Marcas
Bajo la marca Condesa de Ramos elaboran un blanco verdejo del mismo nombre. Montetoro es la familia más numerosa, con hasta 5 vinos distintos (joven, roble francés, crianza, gran reserva y rosado). La Serie Naranja cuenta con la particularidad de estar integrada por 3 vinos no acogidos a denominación de origen. Como señalan en la bodega, la Serie Naranja “no sigue reglas preestablecidas. Son pequeñas producciones que hacen de cada vino algo exclusivo”. Los vinos Ramón Ramos son un monovarietal de tinta de Toro ecológico y un cubo emulando al de Rubik en formato 5 litros.
Los viñedos tienen una longevidad de entre 20 y 60 años, con algunos prefiloxéricos que superan el siglo de existencia. Otra particularidad de esta empresa es que cuenta con una antigua bodega subterránea del siglo XII en la que en la actualidad reciben visitas.
Aumento de las exportaciones
Bodegas Ramón Ramos produjo 390.000 botellas en 2023, una cifra que esperan incrementar hasta las 450.000 botellas en el presente ejercicio. La vocación exportadora está presente en la estrategia de la bodega desde sus inicios. No en vano, podemos encontrar sus vinos en más de 30 países, si bien sus plazas fuertes fuera de nuestras fronteras son el norte de Europa, Reino Unido, EE UU y Brasil.
“Hemos tratado de diferenciarnos destacando la naturalidad de cada variedad, respetando el carácter que el terruño nos proporciona. La palabra más escuchada en nuestras catas es fruta. El campo nos da lo mejor si tú le ofreces lo mejor; por eso valoramos mucho el trabajo en el viñedo. Nuestros vinos no se encuentran en grandes cadenas, ya que, a excepción de la exportación, la mayor parte de las ventas las realizamos vía telefónica o a través de nuestra web”, señala Ramón Ramos, segunda generación de la bodega, en la actualidad al frente del negocio.
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