El Comité Ejecutivo de Cecale, convocado de forma extraordinaria en la tarde del martes, aprobó instruir un procedimiento de información interna “lo más independiente, transparente y confidencial posible”, en palabras de su presidente, Jesús Terciado, para lo que se contratará a un abogado externo, con el fin de conocer cómo sucedieron los hechos del pasado día 8 de mayo y las posibles consecuencias jurídicas.
En esa fecha, Juan Antonio Martín Mesonero, presidente de la patronal salmantina Confaes, acompañado de Bernabé Cascón, secretario general de la confederación charra y un miembro del servicio jurídico de esa patronal, se presentó con un notario en la sede de Cecale en Valladolid con el fin de acceder a la información sobre la contabilidad y las cuentas de Cecale, aprovechando que sus máximos dirigentes estaban en Colombia en una misión comercial.
Además, el Comité Ejecutivo de Cecale decidió suspender de forma cautelar su Servicio Jurídico al considerar que puede haber una falta de responsabilidad por su parte a la hora de asesorar a los empleados que estaban en la sede sobre sus derechos y deberes ante este requerimiento del presidente de Confaes, acto que es calificado por Terciado de “extrema gravedad”.
Reprobación
El Comité Ejecutivo de Cecale también aprobó la reprobación de la actuación de Confaes, con 7 votos a favor de los 13 miembros del citado órgano, que puede derivar en su expulsión, aunque de momento se descarta esa medida.
Santiago Aparicio, presidente de la patronal soriana FOES y vicepresidente primero de Cecale, afirmó que es paradójico que las 3 organizaciones provinciales (León, Salamanca y Zamora) que piden la documentación de la patronal regional no tengan auditadas sus cuentas, algo que sí ocurre con Cecale y las otras 6 confederaciones provinciales.
Lucha por la presidencia
Detrás de esta batalla interna está la lucha por acceder a la presidencia de Cecale, ya que Terciado no repetirá en el cargo, por lo que las elecciones se celebrarán en junio. Además, Héctor García Arias, secretario general de la patronal y vinculado a Terciado, dejó recientemente el cargo al no poder aguantar las disputas en el seno de la confederación.
“Incredulidad” en Confaes
Tras la reunión del Comité Ejecutivo, la patronal salmantina envió un comunicado en el que subraya que “el libre ejercicio del derecho a la información” realizado al solicitar notarialmente información “ha tenido una respuesta tan desproporcionada como ilegal, no sólo contra Confaes sino contra el personal de Cecale, y en especial, contra los asesores jurídicos y responsables de relaciones laborales de la patronal regional, a quien sin ningún tipo de justificación se ha apartado de su puesto de trabajo”.
La confederación salmantina argumenta que, “ante la orden dada por Terciado desde Colombia de negar la información solicitada” sobre las cuentas de la organización, Confaes “decidió actuar notarialmente para defender la transparencia de la organización y garantizar así su viabilidad, decisión que se encuentra amparada por los estatutos de Cecale”.
La agrupación presidida por Martín Mesonero censura el intento de Terciado de “ocultar las cuentas y la realidad de Cecale mediante la decisión, sin precedentes en la historia de las organizaciones empresariales, de postularse como secretario general, decisión que vulnera flagrantemente tanto los estatutos como la legalidad vigente”.
Confaes ahonda en la “profunda división” que existe en el seno de la patronal regional y en las “irregularidades” detectadas en su gestión, “que ponen en riesgo la viabilidad económica” de Cecale, una circunstancia que está siendo examinada por los servicios jurídicos de la organización a fin de poder “entablar acciones penales”.
Resolver el conflicto en beneficio de los empresarios
Tomás Villanueva, consejero de Economía y Empleo de la Junta, instó a Cecale a solucionar sus problemas para centrar los esfuerzos en ayudar a las empresas de Castilla y León. Para una rápida resolución, el representante del Ejecutivo autonómico pidió “generosidad”, pues considera que los empresarios, sobre todo los pequeños y medianos, necesitan “una patronal fuerte” que defienda sus intereses.
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