En enero de 2011 operaban en España 64.875 empresas gestoras de establecimientos de restauración, que contaban con 72.527 locales. Alrededor del 20% de éstos, en torno a 14.500, estaban adscritos a cadenas -3 o más restaurantes bajo una misma enseña-, lo que supone un incremento del 6% con respecto al año anterior. “A pesar de la adversa situación económica, que ha provocado el cierre de numerosos espacios en los últimos años, las empresas organizadas han aumentado debido tanto a la entrada de nuevas compañías como a la ampliación y diversificación de las redes ya operativas”, concluye un informe sectorial elaborado por DBK.
Auge de la comida rápida
La facturación global de estos establecimientos se situó en 17.300 millones de euros, tras las caídas del 16% y el 6% registradas en 2009 y 2010, respectivamente. El segmento de comida rápida es el que experimentó una evolución más positiva, al incrementar su volumen de negocio un 3%, hasta los 2.900 millones de euros. Esta categoría, que incluye además a los autoservicios tradicionales, aumentó también su participación en el conjunto del mercado hasta el 17%.
Los ingresos de los restaurantes con servicio en mesa, por su parte, se cifraron en 12.550 millones de euros, un 8% menos que en 2009. En este segmento la restauración informal continuó aumentando su cuota de participación frente a la restauración tradicional.
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