A partir de las reflexiones de los principales actores del sector, PwC ha elaborado el informe Temas candentes del sector inmobiliario español, donde apuesta por el modelo de alquiler de viviendas e insta a las administraciones públicas a optimizar su parque inmobiliario, compuesto por 53.000 inmuebles y de los que el 18% se considera “líquidos a corto plazo”.
En este sentido, el documento solicita un análisis detallado del parque inmobiliario nacional que permita “disponer de una fotografía clara del sector y acometer su transformación”. En cuanto a la demanda, que los expertos sitúan entre 150.000 y 200.000 viviendas anuales, explica que representa una cifra muy inferior a la del boom, por lo que invita a las promotoras a concienciarse de la necesidad de satisfacer las necesidades actuales de los clientes.
Ventas masivas del banco malo
El informe pronostica también que la futura Sociedad de gestión de activos procedentes de la reestructuración bancaria, el denominado banco malo, provocará “una nueva configuración de la oferta inmobiliaria en los próximos años, con ventas masivas de activos inmobiliarios por parte de las entidades financieras”.
El problema del suelo
Por otra parte, los expertos que han participado en la elaboración del documento reclaman un nuevo marco regulatorio específico para la industria, ya que las reformas de carácter inmobiliario adoptadas en los últimos años “no han afrontado el mayor problema del sector: el suelo”.
Por un lado, consideran necesaria una profunda revisión que agilice los procesos urbanísticos desde la compra del suelo hasta la construcción del inmueble, así como la adopción de medidas fiscales que equiparen a la industria española con el resto de mercados europeos, con el objeto de atraer la inversión extranjera.
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