I-Solagua es un proyecto empresarial puesto en marcha en 2017 que centra su actividad en la ejecución de instalaciones de autoconsumo energético con renovables y riego para un uso eficiente del agua y la energía a partir del desarrollo de la inteligencia artificial.
Alberto San Mamés Fernández, director técnico de I-Solagua, con amplia experiencia en el sector fotovoltaico y en la generación de energía con diferentes fuentes (solar, eólica y cogeneración), está inmerso en la actualidad en este proyecto en el que se pone de manifiesto la vital importancia del ahorro energético de los recursos hidráulicos.
En la compañía señalan que todo cultivo “o producto transformado que persiga una baja huella de CO2 tiene que implementar en sus explotaciones instalaciones como las que desarrolla I-Solagua”, sostienen los responsables de la firma.
Tecnología 4.0
El uso de las energías renovables y la tecnología 4.0 aplicada a telegestión, automatismos o sensorización, “nos permite conseguir importantes ahorros de los consumos de las energías convencionales, reducir los costes energéticos, además de lograr evitar emisiones contaminantes a la atmósfera y reducir el consumo de agua en los regadíos”, aseguran.
I-Solagua cuenta con un “experimentado equipo técnico y con sofisticada tecnología propia para realizar una instalación, desde la concepción y el diseño de la misma hasta su puesta en marcha y mantenimiento”. Actualmente, la empresa trabaja en desarrollos de modelos basados en inteligencia artificial que optimizarán tanto la curva energética como los ahorros de agua y fertilizantes, y favorecer así la autonomía en las decisiones para facilitar el mejor desarrollo de las plantaciones.
Las iniciativas de I-Solagua están alineadas con las medidas de reducción de emisiones del Acuerdo de París, objetivos europeos, nacionales y con las propias iniciativas de la Junta, que ha presentado las diferentes medidas para reducir en más de un 30% el consumo de energía y las emisiones de CO2 en la comunidad autónoma hasta el año 2020, reto que se sitúa diez puntos por encima del marcado por la UE.
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