Sin grandes alardes creativos, pero con mezclas de sabores bien resueltas como en su Gazpacho de mango y tomate amarillo con sardina ahumada o en su Consomé de pimientos rojos con ravioli de berenjena y albahaca, Marc Fosh ostenta una estrella Michelin en Palma de Mallorca.
Su restaurante está ubicado en un precioso e histórico inmueble del siglo XVII que hoy alberga el minimalista Hotel Convent de la Missió, un edificio con mucho encanto en el centro histórico de la capital mallorquina.
Menús
El establecimiento del chef de origen británico ofrece la posibilidad de disfrutar también en su coqueta terraza veraniega de 3 tipos de menús degustación maridados con vinos, el más largo de 7 platos y otros 2 de 5 elaboraciones, 1 de ellos vegetariano. El Yogurt de leche de oveja y melocotón -dulce y frutal con reminiscencias de la infancia- y los Skins de patata con clorofila de berros, trufa de verano y yema de corral a baja temperatura -untuosa mixtura de huevo y hongos como sabores primigenios – son 2 ejemplos de este último, que se completa con Apio-nabo asado con quinoa, crema de parmesano, manzana verde e hinojo salvaje, una propuesta bastante más sosa.
El postre retoma el correcto nivel de sus elaboraciones con Panacotta de coco, sorbete de maracuyá espino marino y pisco sur de moras, exótico y muy refrescante. El servicio, amable pero lento entre plato y plato. Se echa en falta la presencia de un sumiller, máxime cuando los menús se ofrecen con maridaje de vinos.