La sociedad Ecoembes, dedicada a la recuperación y el reciclaje de los envases ligeros, de papel y de cartón, se reunió este martes con empresas de Valladolid para resolver sus dudas en relación con los cambios introducidos en la Ley de Residuos y Suelos Contaminados y sobre el nuevo programa informático diseñado para agilizar estas gestiones.
Según la legislación, todas las compañías que ponen un envase en el mercado deben ser responsables de su gestión una vez que se convierte en residuo. Para cumplir con esta premisa medioambiental, más de 12.000 empresas -643 de ellas de Castilla y León- trabajan con Ecoembes y anualmente realizan una declaración donde especifican el número de productos envasados que han comercializado, el peso y el material del que están fabricados, y abonan el conocido Punto Verde.
Residuos como materia prima
Con estas aportaciones, según marca la Ley de Envases, Ecoembes financia la recogida selectiva a los ayuntamientos y estos envases pueden tener una nueva vida tras ser reciclados. Como ejemplo, la sociedad explica que con el reciclaje de 40 botellas de plástico de agua mineral se puede fabricar un forro polar.
“Gracias al compromiso de las empresas de Castilla y León que participan en Ecoembes y de la implicación de los ciudadanos, en 2010 se pudieron reciclar más de 65.320 toneladas de envases que de otra manera habrían acabado en vertederos sin su correspondiente aprovechamiento”, señalan las mismas fuentes.
Europa Press / Castilla y León Económica
