El 16% de los castellanos y leoneses cree que la Seguridad Social desaparecerá a largo plazo, dato que coincide con el de 2010, frente al 17,5% nacional, según las conclusiones del Cuarto Observatorio Caser Pensiones extraídas de más de 8.000 encuestas por todo el territorio nacional.
Los encuestados consideran que la probabilidad de que el Sistema de Pensiones quiebre es alta -le otorgan 6,11 puntos sobre 10, similar a los 6,19 puntos a nivel nacional-. “En 2009 ya había evidencias de que la cosa no iba bien, pero no existía ningún atisbo de una reforma de pensiones, por lo que es lógico que la confianza ganara fuerza”, destacó Manuel Álvarez, director del Observatorio de Pensiones Caser, durante la presentación del estudio y donde subrayó que Castilla y León es una región que “tiene muchas peculiaridades”.
Rechazo al papá Estado
En este sentido, explicó que el 62% de sus habitantes considera que la responsabilidad de garantizar que las personas mayores dispongan de una pensión digna debe ser tanto del Estado como de los individuos, aunque considera que la responsabilidad correspondería 6,45 puntos sobre 10 al Estado y 3,55 puntos al individuo.
“En Castilla y León hay un sentimiento o filosofía de que el tema de las pensiones no es sólo una cuestión de papá Estado sino que también debe ser una responsabilidad compartida entre las personas y las instituciones”, precisó Álvarez.
A su juicio, este aspecto está relacionado con que Castilla y León sea una de las comunidades autónomas con una cuantía media anual de ahorro más alta y que en 2011 se sitúa en 2.730 euros al año, lo que sitúa a la región sólo por detrás de Aragón (2.840 euros). “La filosofía castellana y leonesa parece que va mucho más por el sentimiento del ahorro que otras zonas”, insistió.
El 37% ahorra para su jubilación
No obstante, el porcentaje de los castellanos y leoneses que ahorra de cara a su retirada cae del 42% registrado en 2010 hasta el 37% de este año, principalmente por causas como la imposibilidad de hacerlo (56%), ser demasiado joven (52%), confianza en la Seguridad Social (32%) o no ser una persona previsora (25,5%), entre otras.
Sin embargo, la edad media de inicio del ahorro en Castilla y León ha descendido en el último año: ahora se sitúa en los 31 años, frente a los 34 del año pasado y muy inferior a la que señalaban en 2009 que era 41 años.
Asimismo, el 86% de los encuestados cree que es compatible ahorrar para la jubilación a la vez que se tiene una hipoteca, siempre y cuando la cuota no supere el 41% de los ingresos totales del hogar, un dato algo superior al obtenido al nivel nacional donde el 84% lo cree compatible si la cuota no supera el 36% de los ingresos.
Edad ideal de jubilación, los 64 años
Respecto a las medidas acometidas para reformar el Sistema de Pensiones, los encuestados se muestran bien informados y manifiestan su rechazo mayoritario a las mismas, especialmente en lo relativo a aumentar la edad de jubilación, que obtiene una nota de 4,32 puntos sobre 10; congelar las pensiones (3,60) o aumentar el período de cotización (4,48), mientras que se muestran partidarios de soluciones como mejorar la natalidad (6,52), incrementar las cotizaciones a las empresas (5,84) y dar ventajas fiscales (6,29). Asimismo, el desconocimiento sobre el Pacto del Toledo es grande: sólo el 35% afirma conocerlo, aunque supera ampliamente la media nacional (27%).
La edad ideal de jubilación para los castellanos y leoneses, como en 2010, se fija en torno a los 64 años, igual que en el resto de España, aunque el 50% ve bien que se permita seguir trabajando a quien lo desee, siempre que sea en profesiones lógicas.
Finalmente, el 30% de los ciudadanos considera que debería ser obligatorio por ley que las empresas aportasen una cantidad de ahorro privado para sus empleados, una cifra 5 puntos inferior a la de 2010. Además, el 48% piensa que, aunque fuera voluntario, tendría que estar más incentivado en el caso de las empresas que sí lo hicieran.
Europa Press / Castilla y León Económica
