Más de 127.000 castellanos y leoneses firmaron un contrato que implicaba el desplazamiento a otra provincia para acceder al mercado laboral en el año 2014, lo que supone 17.000 personas más que en 2013, cuando se firmaron 110.000 contratos, según el análisis realizado por Randstad de los datos de migración interprovincial y contratación recogidos en el Servicio Público de Empelo Estatal (SEPE).
De esta manera, la tasa de movilidad en Castilla y León se situó en el 15,7%. Es decir, el 15,7% del total de contratos registrados en la comunidad autónoma (una cifra que supera los 730.000) implica que el trabajador cambie de provincia para acceder al empleo.
España
A nivel nacional, la tasa se sitúa 3 décimas porcentuales por encima de la media, en el 12,6%. Este índice supone un aumento cuando se compara con los datos de 2013, que registró una tasa de movilidad en España del 12,2%.
Por otra parte, la movilidad de los trabajadores influye de manera directa en el mercado laboral de cada región. Este desplazamiento provoca aumentos y descensos de las tasas de ocupación y en la mano de obra disponible en cada provincia.
En el caso de Castilla y León, cabe destacar el saldo positivo de Soria (+2.100) y Palencia (+1.000). En el lado opuesto, como provincias emisoras se sitúan el resto de provincias castellanas y leonesas, donde León registra el número más elevado de profesionales que se van (-6.000), seguido de Valladolid (-5.300), Salamanca (-5.200) y Burgos (4.600).
Castilla y León Económica / Europa Press