La demanda de empleo típica de los meses de vacaciones supondrá este año la creación de 700.000 puestos de trabajo temporal, según los cálculos realizados por la consultora Randstad en base a sus propios datos y los proporcionados por instituciones como el Ministerio de Trabajo e Inmigración y del Servicio Público de Empleo Estatal. Sólo entre los meses de mayo y julio se espera un incremento interanual del 6% en la contratación, con un pico de 182.000 nuevos puestos generados en junio.
El crecimiento del empleo en la temporada estival vendrá de la mano del sector turístico, que se recupera gracias a la positiva evolución de las economías europeas, en especial, la alemana y la británica, los principales mercados de origen de turistas que recibe España. De hecho, esta tendencia ya comenzó a notarse en el mes de abril: los alemanes aumentaron un 23,6% sus pernoctaciones y los británicos un 16,5%.
Lleno en las costas, pero menor gasto turístico
Otro factor positivo para el incremento del turismo en el país es la inestabilidad de los países del norte de África, que está provocando que muchos de sus turistas se decidan por las costas canarias y baleares, que rozan la ocupación completa y registran un incremento significativo de la demanda de empleo. De hecho, la entrada de turistas extranjeros a Canarias refleja un aumento interanual de hasta el 18,7% durante el primer trimestre, principalmente gracias al uso de compañías de bajo coste.
No obstante, el auge del turismo interno está provocando también un elevado movimiento de viajeros hacia las principales capitales de provincia españolas. Aunque los hoteles no se han visto forzados a reducir sus precios para atraer un mayor número de turistas, el total del gasto indica que este año se conseguirán más visitantes, pero de menor poder adquisitivo, por lo que otros sectores vinculados, como el comercio, la hostelería o el transporte, puede que no experimenten un impulso tan notable en su demanda de personal.
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